Para cumplir con sus obligaciones fiscales adecuadamente, los autónomos deben presentar diferentes documentos, y uno de los más importantes son los Modelos 130 y 131.
¿Qué son los modelos 130 y 131 y para qué sirve en la gestión fiscal?
Los Modelos 130 y 131 son la presentación trimestral de pago fraccionado del IRPF de las personas físicas.
Es decir, es una autoliquidación del IRPF que permite a los autónomos realizar el pago de este impuesto cada tres meses en lugar de hacerlo, de manera íntegra, una vez finalizado el año fiscal.
Después, al presentar la Declaración de la Renta, la Agencia Tributaria calcula cuál es la cantidad definitiva que corresponde al pago de este impuesto anual: si el contribuyente ha pagado más dinero de lo que le corresponde sumando sus autoliquidaciones trimestrales, Hacienda le realizará una devolución; en caso contrario, tendrá que abonar la diferencia.
Los contribuyentes que tienen la obligación de presentar dichos modelos son autónomos, profesionales y socios de sociedades civiles, así como socios de comunidades de bienes que ejercen una actividad económica.
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Proceso de presentación de los modelos 130 y 131
Dichos modelos pueden presentarse de manera presencial u online, a través de la web de la Agencia Tributaria.
En el primer caso, hay que descargar el documento correspondiente en la sede electrónica de la AEAT y entregarlo cumplimentado en una oficina de Hacienda.
En el segundo, el autónomo puede usar un protocolo de identificación y autentificación o la firma con clave de acceso, a través del sistema Cl@vePIN, para entrar en la plataforma de la Agencia Tributaria.
Después, una vez haya accedido a su área personal, tiene que buscar el documento, rellenar los Modelos 130 y 131 y confirmar el envío desde la misma plataforma.
La presentación telemática de dichos modelos, también es la opción elegida por los Despachos Profesionales que utilizan software específicos para agilizar la gestión fiscal de sus clientes.
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¿Cuándo se debe presentar los modelos 130 y 131 y cuál es su frecuencia de pago?
Los modelos 130 y 131 se presentan después de cada trimestre fiscal.
Los plazos para presentar y abonar este documento son:
- Primer trimestre: del 1 al 20 de abril
- Segundo trimestre: del 1 al 20 de julio.
- Tercer trimestre: del 1 al 20 de octubre.
- Cuarto trimestre: del 1 al 30 de enero.
Aunque dichos modelos pueden ser negativo, positivo o neutro, deben presentarse siempre que se esté dado de alta en esta obligación en la Agencia Tributaria porque no se ha indicado expresamente lo contrario en los Modelos 036 y 037.
Esto quiere decir que, si un trimestre no has tenido actividad, pero no has desmarcado la casilla correspondiente de los Modelos 036 y 037, debes presentar estos impresos aunque el resultado sea negativo o neutro.
Respecto al abono de la autoliquidación trimestral del IRPF a través de los modelos 130 y 131, puede aplazarse doce meses (autónomos) siempre que la cantidad pendiente de pago no supere los 30.000 €.
Pasos para calcular los modelos 130 y 131 de forma precisa y eficiente
Los pasos para calcular el Modelo 130 son:
- Calcula el 20% de tu rendimiento neto trimestral.
- Accede a la página web de la Agencia Tributaria y descarga el formulario oficial correspondiente a esta autoliquidación.
- Completa los datos personales y fiscales que te soliciten.
- Calcula los pagos fraccionados correspondientes al trimestre que estás declarando. Para ello, tendrás que incluir el rendimiento neto de tu actividad profesional, el porcentaje aplicable, los ingresos o el volumen de ventas trimestrales, tus gastos, si tienes asalariados o no, etc. Con estos datos y especificando tu epígrafe en el IAE, la plataforma calculará el rendimiento automáticamente.
En el caso del modelo 131, que es para la modalidad objetiva o módulos dependerá de la actividad que realice la persona física o la comunidad de bienes.
Si la cantidad resultante es positiva, tendrás que efectuar un “Ingreso a favor del Tesoro Público” marcando la forma de pago que quieras con una X e indicando los datos de la cuenta de adeudo.
Si la cantidad es negativa, podrás solicitar el importe «a devolver» o compensarlo en cualquiera de los siguientes pagos fraccionados del IRPF dentro de ese mismo ejercicio fiscal.
Beneficios de la digitalización en la presentación de estos modelos
Presentar los modelos 130 y 131 a través de la Sede Electrónica de la Agencia Tributaria es sencillo y tiene muchas ventajas.
Lo más importante es que, si tienes todos los datos necesarios para calcular el rendimiento neto, el proceso es automático y el recibo de pago se generará directamente.
La plataforma también permite ajustar las retenciones anuales o llevar un control y seguimiento de este impuesto.
Y es que, calcular el Modelo 131 manualmente puede ser un auténtico «quebradero de cabeza» para los asesores, quienes deben tener en cuenta, tanto las retenciones de sus clientes según su actividad, como las que les realicen terceros (proveedores), además de las posibles deducciones (gastos de suministros, gastos de alquileres, gastos de materiales, gastos de publicidad y promoción, gastos de transporte, gastos de Seguridad Social, etc.).
Esto exige presentar facturas y justificantes, y separar claramente los gastos profesionales de los gastos relacionados con la actividad económica y los gastos personales.
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Cómo la digitalización agiliza la presentación los modelos 130 y 131 y optimiza los procesos
Dichos modelos son una herramienta imprescindible para los autónomos en España: la posibilidad de realizar pagos fraccionados trimestrales y ajustar la base imponible de forma más precisa facilita mucho control sobre sus obligaciones fiscales.
Respecto a la posibilidad de presentar dichos modelos de manera online, supone un importante ahorro de tiempo para las asesorías, además de una comodidad y flexibilidad que se ve acentuada por la reducción de errores.
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Herramientas digitales para la presentación de los modelos 130 y 131
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